FIn de semana en Grazalema. 9 y 10 de Marzo.

Era la quinta subida programada del “Club junto a Deporte y Vida frente al cáncer.” Íbamos a hacer el techo de Cádiz, el Torreón, 1654 m y de camino la Garganta Verde.



Teníamos que ir a Grazalema y por su lejanía se decidió ir a pernoctar dos noches.

Es una sierra muy demandada y para ambos senderos se necesita un permiso especial del parque para poder recorrerlos.

Con bastante tiempo de antelación se hacen las gestiones pertinentes y el lugar de alojamiento.

Con suerte todo cuadra, 20 plazas para ambas cosas.

Muchas idas y venidas, al final 17 senderistas intrépidos nos vamos reuniendo el viernes, cada cual iba llegando según su programado viaje.

Con las viandas que cada cual llevaba, empezamos la convivencia. Una gran sorpresa: iban saliendo manjares, como conejos o pañuelos de la chistera de un mago, hasta postre de zanahoria con receta incluida.

¡¡¡Cada mochuelo a su olivo, que mañana hay que andar!!!

Día 9, sábado. Subida El Torreón.
Después de un suculento desayuno, vamos dirección al puerto del Boyar. Pasados unos kilómetros nos encontramos el aparcamiento y el inicio del sendero.

Foto de salida y preparación para la subida que nos esperaba. Una mañana inusual en cuanto a temperatura, ni invernal, ni primaveral, casi veraniega . Suerte que el sendero asciende entre pinos, palmitos, algarrobos y algún que otro pinsapo; a trechos parecía el bosque encantando con escalones para piernas largas .
Tras pasar más de la mitad de la subida, un pequeño respiro para reponer fuerzas y ver como según el bosque iba desapareciendo se nos abría un campo de visión algo fantástico. Un pequeño anticipo de lo que veríamos en cumbre.

Unas dolinas preciosas nos dan la bienvenida; y una gran mole de piedra se presentaba ante nuestros ojos.

¡Gran sorpresa! Nos habían dicho que había que trepar en la la última parte llegando a la cumbre, pero no fue así; unos lindos escalones altillos y con dificultad pero con cuidado y buen pie; llegamos sin problemas.

Una gran recompensa para el esfuerzo realizado tras 3 Kilómetros de subida, con fuerte desnivel .

!!Cuánto disfrute ya en la cumbre!!

Media provincia de Cádiz a nuestros pies, seis o siete grandes pantanos, pueblos cercanos y lejanos: Olvera, Algodonales, Zahara, Arcos, Benamahoma,.....y el pinsapar de Grazalema.

Sin prisa, comenzamos el descenso.

Ya en los coches cómo no era hora de encerrarse y las piernas estaban cargadas de la bajada, se decidió ir a hacer unos kilómetros de llaneo por la orilla del río desde Benamahoma hasta el Bosque.

Un sendero dominguero, pero bonito.

Cada cual se iba volviendo según sus piernas decían y tomando una cerveza según sus ganas.

Al atardecer volvemos a casa para prepararnos para la cena que teníamos reservada.

Domingo 10. Sendero Garganta Verde.
Esta vez dirección Zahara y bajando el Puerto las Palomas, nos encontramos el aparcamiento y señalización del sendero.

Hoy sí, allí estaban los guardas forestales Juan y María, pidiendo el permiso que previamente nos habían concedido.

Charlando con ellos descubrimos que él era granadino y la charla fue muy entretenida.

Sendero, según ellos muy demandado, con un bajadón de narices cargado de escalones y escarihuelas hasta llegar al río.

Íbamos entretenidos escuchando los pájaros, observando los buitres leonados que volaban sobre nuestras cabezas y buscando las hojas de acanto y sobre todo ver dónde ponías un pie.

Ya en lo profundo del río, empezaron las grandes sorpresas por las cuales había merecido la pena bajar.

Cuevas al aire libre de estalactitas y estalagmitas con una peculiaridad, que estaban inclinadas por la acción del viento y verdes por la mucha humedad y falta de sol.

Al final del sendero una gran cueva de dimensiones espectaculares y una hendidura de paredes verticales de más de 200 metros de altura que el río había horadado a lo largo de los siglos. Aquí el río se encajona y solo es posible con cuerdas y rapeando seguir.

Tomamos algo pero no mucho por la subída que nos esperaba.

Ya nos despedimos y vuelta a casa según cada cual tenía previsto.

Han sido unos días fantásticos, con personas maravillosas, en todo momento dispuestos a convivir como una gran familia.

Doy las gracias a todos por el granito de arena que han puesto para que todo ocurriera cómo ha ocurrido.

!!Hasta la próxima!!.

 

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