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Tras varias llamadas telefónicas conseguimos que el sábado 17 Paco Luis nos sacara a pasear a M. Ángeles y a mí (le convenció M.A.). Nos montamos puntualmente en la furgo a las 8.30 de la mañana y nos desplazamos hasta Tocón de Quéntar, ya que las señoritas teníamos prisa por estar a la hora de comer en casa.

Desde Tocón con un poco de fresco comenzamos la subida al lado del río hacia el Collado del Alguacil, deleitándonos con el espectáculo que nos ofrecía el campo en la primavera y siempre aprendiendo sobre las plantas y lugares por los que pasamos ya que Paco Luis nos instruía. A algunas nos costó más que a otras coronar el collado y tras ingerir nuestros higos y peras continuamos camino por un sendero precioso (la cuerda de los Amigos)  hacia Las Catifas. Las vistas de la Sierra eran espectaculares y se empezaba a notar cómo iba aumentando la fuerza del viento. Desde la base de Las Catifas atrochamos un poco para  llegar a una divertida pista por la iniciamos el descenso, con unas  vistas estupendas de La Peza, Cortijo de Viedma.... Luego pasamos por delante de este cortijo la pista discurría  entre pinos y estaba  sembrada de piñas, eso sí  resguardada del viento que ya había intentado tirarnos en algunas curvas. Tras una larga bajada dejamos el puerto de los Blancares cogimos un pequeño tramo de carretera y vuelta a Tocón. Al final salieron 50 kms. y 1350 m. de desnivel. Lo único malo es que me quedé sin cerveza, pero de esto sólo tengo yo la culpa por quedar para otros quehaceres a las 4. Pero ellos dos dieron buena cuenta de ellas en Cenes.

Gracias Paco por sacarnos y hacernos disfrutar.....

Mª Paz